EL PERFIL DEL PENTAGRAMA: Woman, por Eva Sion
Woman
Faltaban
diez minutos para las 23 horas del 8 de diciembre de 1980, cuando John Lennon y
Yoko Ono volvían a su vivienda, en el edificio Dakota de Nueva York, tras una tarde
de grabaciones en Record Plant Studios. La limusina les había dejado en frente
de la misma puerta hacia la que ellos se encaminaron pasando al lado de un
hombre joven, alrededor de veinticinco años, a quien John le había firmado un
disco aquella misma tarde y que llevaba rondando por allí, mezclado con fans y
periodistas, desde las ocho de la mañana de aquel mismo día. Lo que nadie podía
imaginar era que, pocos segundos después, ese tipo le dispararía cinco tiros
por la espalda… John Lennon moría veinticinco minutos más tarde en el St.
Luke's-Roossevelt Hospital Center, mientras el asesino, cuyo nombre me niego a
seguir publicitando dejando ese mezquino trabajo al periodismo sensacionalista,
permaneció tranquilamente leyendo algunas páginas de El guardián entre el centeno, de Salinger, hasta que lo detuvo la
policía… Flaco favor para una novela tan magnífica.
Este
dramático suceso agigantó el mito de John Lennon como adalid de los defensores
de la paz y los derechos humanos, sin embargo, en el fondo era una persona
mucho más compleja y bastante más contradictoria, y como todos los genios, como
todos los personajes que han dejado su huella de forma permanente sobre la
corteza terrestre y en el fondo de sus semejantes, también bastante menos
grandes y con muchas más miserias de las que nos gustaría reconocer.
All you need is love
Nació
John, el 9 de octubre de 1940, en un hospital de Liverpool después de treinta
horas de parto y en pleno bombardeo de la Luftwaffe hitleriana gracias a que su
tía, Mimi Smith, quien más adelante ejercería prácticamente de madre, arrastró
literalmente a su aterrada hermana embarazada por las calles de la ciudad. Su
padre, Alfred Lennon, era un marino mercante sin deseos de ataduras ni
obligaciones, por lo que se puede decir que creció sin figura paterna ya que,
además, su tío. George Smith, murió cuando él era pequeño, por lo que vivió
siempre rodeado de mujeres:
“There were five women that were my family.
Five strong, intelligent, beautiful women, five sisters. One happened to be my mother.
[She] just couldn't deal with life. She was the youngest and she had a husband
who ran away to sea and the war was on and she couldn't cope with me, and I
ended up living with her elder sister. Now those women were fantastic... And
that was my first feminist education... I would infiltrate the other boys
minds. I could say, "Parents are not gods because I don't live with mine
and, therefore, I know.”[1]
Mother
Cuando
contaba tan solo cinco años de edad su tía se hizo cargo de él tras denunciar a
los servicios sociales la situación en la que se encontraba el pequeño y Julia,
su madre, que por entonces estaba embarazada de nuevo de otro hombre, tuvo que
dejarle la custodia a su hermana, sin embargo lo visitaba casi a diario en la
granja donde vivían y a partir de los once años era él quien se acercaba a
Blomfield Road, que era donde ella residía. Julia le enseñó a tocar el banjo y
le compró su primera guitarra acústica que solo podía tocar en su casa, pues su
tía no estaba de acuerdo en que dedicase demasiado tiempo a la música, pues
como alumno era bastante desastroso y despreocupado, dedicándose casi todo el
tiempo a dibujar historietas cómicas para burlarse de los profesores y en su
informe escolar de tercer año se decía:
"Certainly on the road to failure...
hopeless... rather a clown in class... wasting other pupils' time."[2]
Sus
compañeros preferidos durante los primeros años de adolescencia eran sus primo
Stanley Parkes, siete años mayor, y su prima Leila con quienes se iba a los
espectáculos de Blackpool varias veces cada semana y con quienes más adelante
pasaba sus vacaciones en Escocia. Así que su comportamiento fue empeorando con
el tiempo convirtiéndose en un teddy boy
irreverente, grosero e inmaduro, suspendiendo los exámenes, a pesar de la ayuda
de Cynthia Powell, quien luego sería su primera esposa, por lo que fue expulsado.
Al poco tiempo, Julia, su madre, moría atropellada por un policía que conducía
bebido. Todo ello hizo que su carácter se forjara a base de amargura y
rebeldía:
“Part of me would like to be accepted by all
facets of society and not be
this loudmouthed lunatic poet/musician. But I cannot be what I am not... I was
the one who all the other boys' parents—including Paul's father—would say,
'Keep away from him'... The parents instinctively recognised I was a
troublemaker, meaning I did not conform and I would influence their children,
which I did. I did my best to disrupt every friend's home... Partly out of envy
that I didn't have this so-called home ... but I did...”[3]
And I Love Here
Cynthia y
John eran compañeros de clase y al principio ella no se sentía especialmente
atraída por él, sin embargo poco a poco se fueron acercando y tras una noche de
copas en el pub Ye Crake, que ambos frecuentaban igual que años antes hicieran
los doctores Thomas Cecil Gray y John Halton, se convirtieron en una pareja
inseparable, hasta el extremos de viajar a Alemania cuando la iniciática gira
de The Beatles en Hamburgo.
Lennon
era un joven celoso, desconfiado e inseguro, lo que le fue transformando en un
hombre posesivo e incluso violento. Sin embargo, cuando en 1962 Cynthia se
quedó embarazada, no tuvo ningún problema en asumir su responsabilidad y estuvo
conforme en casarse con ella a pesar de que su familia, con su tía al frente,
le aconsejaran lo contrario. Contrajeron matrimonio el 23 de agosto de ese
mismo año con su mánager, Brian Epstein, como padrino y con la total ausencia
de la familia de John. Esa misma noche tenía un concierto y eso fue así casi a
diario durante bastante tiempo, porque la Beatlemanía se había adueñado de los
corazones y las cabezas de todo el Reino Unido, por lo que fueron obligados a
mantener su nuevo estado en secreto para no desanimar a las legiones de fans…
Julian Lennon nació el 8 de abril de 1963 y John lo vio por primera vez tres
días después… y, al igual que su matrimonio, se mantuvo en un estricto secreto…
Al poco
de nacer el niño, John se marchó de vacaciones a España con Brian Epstein, lo
que provocó bastantes comentarios malintencionados al ser éste homosexual y
saberse de “buena tinta” que se sentía atraído por Lennon:
"Well, it was almost a love affair, but
not quite. It was never consummated. But it was a pretty intense relationship.
It was my first experience with a homosexual that I was conscious was
homosexual. We used to sit in a café in Torremolinos looking at all the boys
and I'd say, 'Do you like that one? Do you like this one?' I was rather
enjoying the experience, thinking like a writer all the time: I am experiencing
this."[4]
Pero John
siempre torturó con mofas y burlas al pobre Epstein por su condición de
homosexual y judío y llegó a golpear a un cantante de rap por gastarle una
broma sarcástica en relación a este viaje al que denominó “luna de miel”.
Por otro
lado, no tardó John en caer en el mundo subterráneo de las drogas, sobre todo
del LSD, al que se aficionó, según dicen, por culpa de su dentista, quien se lo
dio a probar sin avisarle de que lo hacía, así como también se dejó atrapar por
el mundo misterioso y enigmático de las meditaciones trascendentales, todo lo
cual fue causa de su ruptura con Cynthia, según ella, aunque algo tendría que
ver el hecho de haber conocido a Yoko Ono…
Love
La
enigmática Yoko Ono nació en Tokio que, como todos sabéis, es la capital de
Japón, el 18 de febrero de 1933, o sea, que si las cuentas no me fallan, era
siete años mayor que John, con quien se casó en Gibraltar el 20 de marzo de
1969. Esta señora, perteneciente a la aristocracia de su país, es una artista
conceptual perteneciente al grupo vanguardista Fluxus, para cuyos integrantes
el arte es algo total y el lenguaje no es el fin sino el medio y consideran a
las obras de arte tradicionales simple mercancía. Yoko y John se conocieron en
una exposición de la artista consistente en que cada persona asistente debía
clavar un clavo sobre una madera, y poco después él le dejó una partitura
original de The Word para un trabajo que ella estaba realizando con John Cage.
Esto era hacia finales de 1966, pero poco tiempo más adelante, aprovechando un
viaje de Cynthia, John la metió en su casa de la que ya no salió… y Lennon se
divorció de su esposa el 21 de noviembre de 1968, cuando Yoko ya había tenido
un aborto.
John
reconoció que gracias a Yoko comenzó a cuestionarse su comportamiento cruel con
las mujeres, sobre todo con su primera esposa a la que golpeaba e intentaba
apartarla de todo aquello que le pudiera hacer feliz. Pero tampoco la relación
entre ellos fue un camino de rosas, pues eran dos personajes extraños y dos
mentes complicadas, sin embargo daba la sensación de John estaba bajo algún
tipo de influjo de Yoko, a quien consideraba como un ser mágico capaz de
solucionarle todos sus problemas, sin embargo, ambos se engañaron mutuamente en
múltiples ocasiones. En su luna de miel aprovecharon para realizar la primera
de sus famosas “encamadas por la paz” que duró toda una semana en un hotel de
Ámsterdam. La segunda querían hacerla en los Estados Unidos, pero se les negó
la entrada al país, por lo que la realizaron en Montreal, Canadá, donde
grabaron “Give Peace a Chance” para
dejar constancia del hecho… Todos estos actos de protesta llegaron a la cumbre
con el “Bagism”, presentado en
durante una conferencia de prensa en Viena, y que consistía en envolverse con
bolsas de plástico todo el cuerpo para que el resto de la gente no te pudiera
juzgar por el color de tu piel, ni por tu género, ni por tu cabello, ni por tu
forma de vestir, ni edad, etcétera… Como colofón, John cambió su nombre
oficialmente en un acto celebrado en la azotea del edificio Apple Corps,
añadiendo Ono como su segundo nombre...
Give Peace a Chance
Pero el
exceso con las drogas, la enorme cantidad de compromisos de trabajo, las cada
vez más frecuentes crisis emocionales y las influencias psicodélicas de los
innumerables charlatanes que pasaron por sus vidas, minaron tanto la
estabilidad de The Beatles como la del matrimonio Yoko-John. Al separarse la
banda, ella le propuso marcharse a vivir a Nueva York y así lo hicieron en
agosto de 1971. Pero la separación de la pareja parecía inevitable, tanto que
incluso Yoko le buscó una sustituta…
Hey Jude
En 1973, May
Pang, una neoyorkina de origen chino, escritora, diseñadora y que por entonces,
cuando contaba veintitrés años de edad, trabajaba como asistente personal y
coordinadora de producción discográfica de John y Yoko, fue abordada por ésta y
le confesó que ella y su marido estaban bastante alejados el uno del otro y que
habían decidido separarse durante un tiempo para comprobar si podían vivir el
uno sin el otro, por lo que le sugirió a Pang que se convirtiera en su amante.
Como comprenderéis, Pang se quedó de piedra, pero la verdad es que John le
gustaba y al final decidió aceptar. John y ella se mudaron a California y
mantuvieron un “romance” de dieciocho meses que Lennon calificaría como su “Lost Weekend.”[5]
Sin embargo esta muchacha influiría en John para que arreglase un poquito de su
vida desbaratada: por un lado, le convenció de que reanudara sus relación con
Julian, su hijo, al que no veía en años y quien tenía más amistad con McCartney
que con su propio padre. Paul compuso “Hey
Jude” para consolar al muchacho tras el divorcio de sus padres. De él diría
John en una entrevista: "Sean was a
planned child, and therein lies the difference. I don't love Julian any less as
a child. He's still my son, whether he came from a bottle of whiskey or because
they didn't have pills in those days. He's here, he belongs to me, and he
always will."[6]
Sin embargo, Julian recuerda perfectamente que cuando era un niño "I was trundled home from school and
came walking up with one of my watercolour paintings. It was just a bunch of
stars and this blonde girl I knew at school. And Dad said, 'What's this?' I
said, 'It's Lucy in the sky with diamonds.'"[7] Pero
gracias a May Pang Julian pudo viajar a Los Ángeles junto con su madre y
recobrar el cariño de su padre. Así mismo, ella le volvió a reconciliar con
Ringo Starr, Paul McCartney, Mal Evans y Harry Nilsson. Este último la salvaría
de ser estrangulada por Lennon en una típica bronca familiar…
Lucy in the sky with diamonds.
Pero en
1974 regresaron a Nueva York por motivos de trabajo y, aunque en un principio
se negaba a recibir las llamadas de Yoko Ono, un día aceptó reunirse con ella
para hablar y ya no volvió jamás con May Pang.
Ono quedó
embarazada con mucha rapidez tras la reconciliación, pero sólo estuvo de
acuerdo en tener el hijo si Lennon prometía que él se encargaría del niño. Sean
nació el 9 de octubre de 1975, justo cuando su padre cumplía treinta y cinco
años… Y el final ya lo conocemos porque esta historia de John Lennon y las
mujeres de su vida concluye tal como comenzó.
You Are Here
Personas que han visitado esta página hasta el 31 / 08 / 2018:
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[1] “Había cinco mujeres que eran mi familia.
Cinco inteligentes y fuertes mujeres. Cinco hermanas. Aquellas mujeres eran
fantásticas (...) Esa fue mi primera educación feminista (...) Una de ellas
resultó ser mi madre (...) No sabía cómo enfrentarse a la vida. Tenía un marido
que se escapó a la mar en medio de una guerra y no podía conmigo. Por aquel
entonces yo tenía cuatro años y medio. Al final acabé viviendo con su hermana
mayor. Aquel conocimiento y el que yo no estuviera con mis padres me hizo ver
que los padres no son dioses.”
[2] «Sin esperanzas. Un payaso en
clase. Hace perder el tiempo al resto de los alumnos».
[3] Una parte de mí quería ser
aceptado por todas las facetas de la sociedad y no ser el músico bocazas y
lunático que soy. Pero no puedo convertirme en algo que no soy. Dada mi
actitud, los padres de los otros chicos (...) reconocían instintivamente lo que
yo era, es decir, un alborotador. Sabían que no iba a ser un conformista y que
influenciaría a sus hijos, que es lo que luego sucedió realmente. Hice todo lo
posible por causar problemas en la casa de los amigos que tuve en parte por
envidia, porque yo no tenía eso que llaman hogar. Aunque en realidad lo tenía.
[4] «Bueno, era casi una historia de
amor, pero no del todo. Nunca se consumó. Pero fue una relación muy intensa.
Fue mi primera experiencia con un homosexual siendo consciente de su condición.
Solíamos sentarnos en un café en Torremolinos mirando a todos los chicos y yo
decía, “¿Te gusta ese? ¿Te gusta este?” Yo estaba más bien disfrutando de la
experiencia, pensando como un escritor todo el tiempo: estoy experimentando
esto».
[5] El fin de semana perdido.
[6] «Sean era un niño planeado, y ahí
radica la diferencia. No es que no quiera a Julian. Por mucho que viniera de
una botella de whiskey o porque entonces no había píldoras, es mi hijo, y
siempre lo será»
[7] «iba de regreso a casa de la
escuela y llegue caminando con una de mis pinturas de acuarela. Era sólo un
montón de estrellas y esta chica rubia que conocí en la escuela. Y Papá dijo:
“¿Qué es esto?” Yo dije, “Es Lucy en el cielo con diamantes”».
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